Requiem por Randy Pausch

sábado, 26 de julio de 2008

25 de julio de 2008

Randy Pausch fallece a la edad de 47 años. Si te ha dado un vuelco el corazón, sabes de quién te estoy hablando. Si no, deberías seguir leyendo, porque estamos hablando de la persona que dio "la última conferencia", "The last lecture" (18 de septiembre de 2007, Carnegie Mellon University).

Profesor de informática, doctor (que no médico), especialista en realidad virtual, friki de Star Treck, apasionado por Disney... Un tío friki y divertido que decidió hacer algo diferente el día que le ofrecieron dar una conferencia.

Hace 8 días, el jueves pasado, un directivo de Oracle me recomendó (dentro de una conferencia a la que yo asistía) que buscara y viera "The last lecture" de Randy Pausch. Una hora después, una profesora de los cursos que se estaban clausurando en el acto del que la conferencia formaba parte hizo lo mismo. Tome nota y lo puse en mi lista de cosas por hacer. Esta noche he encontrado la noticia de que Randy Pausch ha muerto y he visto su conferencia. Creo que vosotros deberíais hacer lo mismo, porque es genial.

Antes de mostrar los vídeos, permitidme que os recomiende que, si podéis, os sentéis con calma y veáis la versión larga. Si no es así, la versión corta os puede servir de referencia, aunque sigo recomendando que veáis la otra cuando tengáis tiempo y ganas.

Versión original (duración 76 min.)




Versión corta subtitulada (duración 10 min.)




:: Descanse en paz ::




3 cucamonas:

Anónimo dijo...

La ví en exámenes porque un amigo me la recomendó a sabiendas de que no andaba pasando por un buen momento.
La conferencia cambia a todo el que la ve, recomendado. Te hace ver que las ideas no las vas a sacar delante de un ordenador, las ideas de un ingeniero las sacas a partir de hechos que están próximos a la puerta del cuarto. Y que más allá de todo conocimiento, está la vida :D

Rodrigo Garcia Carmona dijo...

Muy, muy bonita.

El final es precioso.

Es larga, pero tenéis que verla.

Deimar dijo...

Imprescindible,aunque no te cambie (soy un insensible, lo se), hay que apreciar el tremendo aplomo y la actitud ante la vida que tenía Randy Paush. Un aplauso a él y a su legado.